







El economista y expresidente del Banco Central de la República Argentina, Alejandro Vanoli, acusó al gobierno de mentir sobre los desequilibrios fiscales, omitir recursos disponibles y priorizar gastos innecesarios, como la compra de aviones a Dinamarca o la eliminación de retenciones a mineras, mientras recorta áreas esenciales como salud y educación. Además, tildó las declaraciones presidenciales de “fuegos de artificio” y denunció una “mirada de gran crueldad” que desconoce incluso la Constitución Nacional.


Sobre la prohibición al Tesoro de financiar el gasto público, destacó que ya “hubo un aumento de la liquidez que provocó la corrida del dólar hace 10 días. El Banco Central perdió un billón de pesos en julio por operaciones de dólar futuro. Entonces, ¿el presidente se va a prohibir a sí mismo?» se preguntó, y afirmó que las declaraciones del presidente «son sobreactuaciones y fuegos de artificio”.
Puntualizó que su amenaza de penalizar a legisladores que aprueben presupuestos con déficit, «es un mamarracho. La Constitución protege a los legisladores por sus opiniones y votos. Decir eso es una barbaridad, muestra un desconocimiento de la Carta Magna que lo llevó a ser presidente”.
El economista destacó que el superávit primario actual se logró mediante una “represión del gasto público inédita” con consecuencias negativas a futuro, como la desinversión en infraestructura y rutas, que incrementa costos económicos y riesgos para la salud y explicó que “no es sostenible. El presidente pone lo fiscal como el centro del problema, pero el gran problema de Argentina es la incapacidad para generar dólares genuinos, no por endeudamiento o blanqueo, sino por exportaciones. Esto lleva décadas, salvo breves momentos históricos”.
Vanoli rechazó la acusación del gobierno de que las leyes aprobadas por el Congreso generen déficit.“El presidente miente. La Oficina de Presupuesto del Congreso dio números mucho menores a los 2,5 puntos del PBI que Milei mencionó en su cadena nacional. Además, la oposición propuso fuentes de financiamiento, como reasignar gastos o aumentar impuestos a sectores específicos. Hay recursos, pero el gobierno elige no destinarlos a lo esencial” y citó ejemplos como la exención de Ganancias al Poder Judicial o los regímenes fiscales especiales de algunas provincias, detallados en el proyecto de presupuesto de 2023, que no se aprobó por el cambio de gobierno.
“En los últimos dos meses, el plan financiero hizo agua. Hubo una devaluación en julio, un aumento de precios y una desaceleración de la economía real por la recesión. Los salarios pierden contra la inflación, el empleo cae y las cuentas externas se desequilibran. No hay un proyecto de país que fomente la producción, solo recortes y privatizaciones”, indicó Vanoli
El economista llamó a una discusión “racional” sobre las prioridades de gasto y la distribución de la carga impositiva. “Argentina tiene recursos. Hay que debatir quién paga los impuestos y qué gastos son imprescindibles para que la gente viva dignamente y la economía crezca. La motosierra y la licuadora no son formas justas ni eficientes de asignar recursos”, declaró a Splendid AM 990.

















