Javier Milei acusó al kirchnerismo de desestabilizar al Gobierno y habló de atentados contra su vida

Este miércoles, 3 de septiembre, es un día clave para La Libertad Avanza debido a que celebrarán el acto de cierre de campaña en la provincia de Buenos Aires. Pero eso no es todo, Javier Milei habló con un medio internacional y dejó títulos realmente inesperados, ya que habló de atentados contra su vida por parte del kirchnerismo.

En una entrevista grabada en la Casa Rosada con Louis Sarkozy, hijo del expresidente francés, el mandatario nacional aseguró que la estrategia del kirchnerismo para desestabilizar a su Gobierno incluye la posibilidad de atentar contra su vida. La declaración, publicada este miércoles, sumó tensión al clima político en plena recta final de las elecciones y justo antes de un acto en el que la seguridad de Javier Milei está en el principal foco de atención.

Consultado sobre el escenario de conflictividad social y política, fue contundente: "La estrategia del kirchnerismo es destruir el plan económico, hacer manifestaciones violentas o intentar matarme". En ese sentido, vinculó los ataques opositores con un plan que busca frenar la aplicación de su programa económico y advirtió que el desafío es permanente. "Están aplicando la estrategia de Hernán Cortés, que es la de quemar las naves: es a todo o nada", señaló.

 Milei dijo que el kirchnerismo busca atentar contra su vida para cumplir su plan.
En otro tramo de la entrevista, el presidente argentino defendió el rol de su hermana, Karina Milei, quien en los últimos días quedó en el centro de la polémica por la filtración de audios: "Logramos en tiempo récord hacer un partido político, que en Argentina es casi imposible. Gran mérito de mi hermana, que ha hecho un trabajo fenomenal".

Javier Milei también redobló sus críticas a los espacios de izquierda y descartó cualquier posibilidad de acuerdo: "No podés darle un milímetro al que te quiere matar. Cuando son oposición, intentan destruir al Gobierno y cuando son gobierno, destruyen el país". Por ese motivo, calificó a los movimientos socialistas del siglo XXI como "psicópatas" y remarcó que su administración no negociará bajo presión ni con actores a los que considera responsables de la crisis estructural de la Argentina.