El Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, anunció que todos los colegios porteños deberán comenzar a aplicar un protocolo contra la violencia digital con el objetivo de prevenir el ciberacoso.
La medida que entró en vigencia a partir de esta semana en todas las instituciones educativas, tanto públicas como privadas, también busca que los colegios tomen medidas para combatir la divulgación de contenido íntimo en internet.
De esta manera, los colegios tendrán que llevar a cabo un registro detallado de la situación sobre las intervenciones realizadas y los testimonios de los alumnos involucrados.
Así, el protocolo aporta orientaciones para intervenir “ante casos de violencia digital o cualquier acción llevada adelante a través de redes sociales, correos electrónicos, plataformas de mensajería o sitios web con el propósito de acosar, intimidar, humillar, discriminar, difamar o vulnerar los derechos de una persona”, señaló el Ministerio de Educación porteño.
Según la Organización Mundial de la Salud, a nivel mundial 1 de cada 6 adolescentes en edad escolar experimentó ciberacoso. Por su parte, en Argentina, la Encuesta Periódica de Acoso Escolar 2024 de la Fundación Encontrarse en la Diversidad reveló que el 40% de los encuestados recibió “mensajes ofensivos a través de redes sociales y dispositivos móviles por parte de compañeros”.
En ese sentido, el ministerio aclaró que la violencia digital incluye acciones como: ciberacoso, uso de IA para creación de imágenes falsas, difusión no consentida de contenido, publicación de datos personales, y hackeo de cuentas.
A través del protocolo, las instituciones podrán detectar cualquier tipo de violencia digital a fin de dar la orientación y protección adecuada a las víctimas, además de promover en las aulas una convivencia sana y respetuosa.
Cómo se implementará el protocolo
Según detalló el ministerio el protocolo consiste en la realización de entrevistas a estudiantes, y a las familias de las víctimas para informarles sobre lo sucedido. También se analizará si la acción o conducta desarrollada amerita una acción restaurativa para los estudiantes involucrados conforme lo previsto en el Sistema Escolar de Convivencia y en el Proyecto Escuela.
En paralelo, las autoridades trabajarán desde los espacios de participación para hacer hincapié en el buen uso de las redes sociales e internet, en el respeto a la intimidad y en la noción de lo público y lo privado. También se conformarán espacios de reflexión que permitan generar acuerdos y compromisos para una mejor convivencia.
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