Pasado el mediodía de este martes, un avión privado en el que solo viajaban el piloto Martín Fernández Loza, de 44 años, y el copiloto Agustín Orforte, de 35, se estrelló contra una vivienda de la localidad bonaerense de San Fernando, en donde ambos tripulantes murieron.
El avión que provenía de Punta del Este pretendía aterrizar en el aeropuerto del municipio; sin embargo, no lo logró. Luego de permanecer en el aire 34 minutos, se despistó justo al momento del aterrizaje y se estrelló contra varias viviendas de San Fernando.
Según informaron desde la Municipalidad de San Fernando, la causa quedó a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado del Juzgado Federal N°1 de turno de San Isidro. Entre las hipótesis que se manejan están un error humano, una falla mecánica, o algún problema de salud del piloto que lo haya hecho perder el control de la aeronave.
En principio, el análisis preliminar de la Junta de Seguridad en el Transporte (JST) apunta a un posible “error humano del piloto, que desencadenó la tragedia”, ya que pudo haber aterrizado “corto de pista”, es decir, que tocó tierra más allá del punto ideal, lo que le dejó solo 280 metros para maniobrar antes de llegar hasta el alambrado perimetral.
De acuerdo con datos preliminares, el avión viajaba a una velocidad estimada de 380 km/h al momento del choque, lo que provocó la explosión de los tanques de combustible ubicados en las alas.
Aunque esta sería la principal hipótesis, también se investiga el rol de los bomberos tras la tragedia. Si bien el personal llegó al lugar en menos de tres minutos, se investigará si el equipo del aeropuerto contaba con herramientas adecuadas para el rescate.
Aparentemente los pilotos habrían muerto por intoxicación con monóxido de carbono al quedar atrapados en la cabina, que fue la única sección que permaneció relativamente intacta tras el impacto, según las pericias que realizó la Policía Federal inicialmente.
Cómo sigue la investigación
La jueza Sandra Arroyo Salgado, a cargo de la causa, evaluará los informes de la JST y otras entidades involucradas para determinar las responsabilidades del caso, además de las causas oficiales del accidente en la localidad.
Para ello, se realizará una recopilación de evidencias en el lugar de la emergencia, se revisarán los registros y resultados de laboratorio, y se analizará la grabación de voz de la cabina y el informe final que presente la JST. Cada prueba podría aportar datos clave sobre los últimos momentos del vuelo.