El municipio de Viedma realizó ayer una entrega de 800 módulos alimentarios para familias de esta ciudad, en instalaciones de Golitat, que son asistidas de diferente manera durante el año y previo a inscribirse para acceder a esta ayuda, pero este hecho puso en evidencia la verdadera cara de la pobreza de la capital, ya que la demanda superó las expectativas y muchos otros vecinos se presentaron en el club a pedir esta caja alimenticia.
«Es la primera vez que me toca vivir esta situación límite. Nosotros recorremos y tenemos mucha presencia en los barrios, y hay familias que realmente no tienen nada», señaló Cristina Cocha, Subsecretaria de Desarrollo Social de la municipalidad, a FM de la Costa, ante la importante demanda de alimentos de sectores carenciados.
Es una preocupación porque la demanda es alta y a decir de la propia funcionaria «estamos parados frente a la pobreza que se está viviendo en este último tiempo. La municipalidad, en un esfuerzo, está haciendo la entrega de un módulo alimentario, pero la situación es complicada».
Estos módulos alimentarios contenían un pollo, frutas, huevos, mayonesa, papas, zanahorias y arvejas, entre otros alimentos.