







El Gobierno nacional, argumentando “restricciones y limitaciones presupuestarias”, decidió unilateralmente suspender la financiación de obras viales en Tierra del Fuego. Esta decisión, adoptada a través de resoluciones de la Dirección Nacional de Vialidad, ignora las declaraciones de los representantes libertarios fueguinos, quienes habían asegurado la continuidad de las obras. La medida deja a la provincia en una situación de extrema vulnerabilidad, especialmente considerando la inminente llegada del invierno.


Entre las obras suspendidas se encuentra la pavimentación de la Ruta Provincial N° 1, incluyendo el puente sobre el Río Turbio, así como diversas obras básicas en rutas nacionales complementarias. La Dirección Provincial de Vialidad (DPV) es responsable del mantenimiento de estos últimos, según convenio, pero ahora enfrenta una total incertidumbre sobre el pago de deudas y actualizaciones por estos servicios.
Esta situación se agrava con la decisión de Nación de no avanzar con la pavimentación de la Ruta Nacional 3 desde la avenida Alem hasta el acceso al Parque Nacional. Más preocupante aún es la falta de información sobre la realización de obras de mantenimiento en el Paso Garibaldi, clave para la conectividad de la provincia.
El desconcierto reina entre el personal de Vialidad Nacional (VN) en Tierra del Fuego. La falta de licitaciones y la ausencia de compra de insumos necesarios ponen en grave riesgo el mantenimiento de la Ruta Nacional 3 durante la temporada invernal. Esta ruta, esencial para la conectividad de la provincia, podría quedar expuesta a las inclemencias del tiempo sin las reparaciones y el mantenimiento necesarios, con el consiguiente riesgo para la seguridad vial. La falta de respuesta a las consultas del Gobierno provincial aumenta la preocupación ante la posibilidad de un colapso en la transitabilidad durante el invierno.















