







A pocos días de conocer los datos oficiales de la inflación, los precios de las verduras dieron un nuevo salto durante marzo en el Mercado Central de Buenos Aires, mientras que las frutas mostraron una leve baja.


La inflación en los alimentos en marzo volvió a dar un golpe al bolsillo. Según un relevamiento del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el precio promedio de las verduras aumentó un 43 % respecto a febrero, destacándose especialmente los incrementos en tomate y lechuga. En contraste, las frutas registraron una caída del 9 %, impulsada principalmente por bajas en el precio del limón, la naranja y la manzana.
El tomate subió un 97,6 %, la lechuga un 77,9 %, la papa un 36,8 % y la cebolla un 1,4 %. Solo la batata y el zapallo escaparon a la tendencia alcista, con bajas del 2,5 % y 6,4 %, respectivamente. El tomate fue el producto con mayor variación interanual, con un aumento del 110,9 %, impulsado no solo por cuestiones estacionales, sino también por subas preventivas y un aumento en las importaciones.
Los datos del Instituto para el Desarrollo Agroindustrial Argentino (IDAA) revelan que en enero se importaron más de 9.200 toneladas de tomate elaborado desde China y Chile, superando todo lo que se había comprado durante 2023. Además, en los últimos meses del año pasado ingresaron 60.000 kilos de tomate fresco desde Paraguay, destinados a la provincia de Mendoza. Estas importaciones no solo impactan en los precios, sino también en la calidad, ya que muchos de los tomates no llegan en condiciones óptimas.
En el caso de las frutas, hubo una suba de la banana del 17,1%, pero el resto mostró caídas: el limón bajó un 39,6%, la naranja un 13,6 % y la manzana un 6 %. Así, el segmento frutas cerró el mes con una baja del 10,1 % en promedio.
A nivel minorista, la inflación de alimentos también mostró altibajos. Durante la última semana de marzo, el aumento fue del 0,4 %, marcando una desaceleración frente al 2,4 % de la semana anterior, según datos de la consultora LCG. Sin embargo, en la primera semana de abril volvió a acelerarse hasta el 0,8 %, empujada por productos panificados.
Las verduras encabezaron los aumentos en el último mes, seguidas por carnes y productos lácteos. En cambio, bajaron los precios de comidas listas para llevar, aceites, frutas, infusiones y panificados. A esto se suma que, según Analytica, los precios de alimentos y bebidas en el Gran Buenos Aires subieron un 0,6 % en la cuarta semana de marzo, con un promedio mensual del 3,3 %.













