


Los Ángeles: tensión e incidentes contra ICE y las políticas migratorias de Donald Trump
Actualidad10/06/2025




La ciudad de Los Ángeles vive horas de tensión tras una serie de protestas desencadenadas por las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que derivaron en 44 detenciones el pasado viernes. Como respuesta, el presidente Donald Trump autorizó el despliegue de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional, alegando que tanto el gobernador de California, Gavin Newsom, como la alcaldesa angelina Karen Bass, fueron incapaces de controlar los disturbios.


En sus redes sociales, Trump tildó la situación de “anarquía” y criticó a las autoridades demócratas por permitir que la violencia se extendiera sin una reacción efectiva, además de no haber informado al Ejecutivo en medio del caos generado por las políticas de la agencia de inmigración. La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, confirmó el envío de tropas en un mensaje en X, destacando la intervención federal como una medida “para restaurar el orden” y permitir que las redadas de ICE culminen con éxito.
Las protestas se originaron luego de que, en un operativo, fueran detenidos decenas de inmigrantes en distintos puntos de la ciudad. Durante el fin de semana, cerca de 1.000 personas se concentraron frente al centro de detención donde permanecen los arrestados, generando enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y daños materiales en edificios públicos. La subsecretaría de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, confirmó que el número de manifestantes creció rápidamente, lo que obligó a las autoridades a reforzar el perímetro con apoyo federal.
Los organismos de derechos humanos y colectivos migrantes denunciaron la manera en que la ICE llevó adelante las detenciones y los calificaron de "provocadores" y "deshumanizantes". En esa línea, señalaron que las detenciones tienen un efecto intimidatorio sobre comunidades enteras y van de la mano con las políticas que impulsó Donald Trump, que buscan deportar a quienes se encuentren en Estados Unidos de manera irregular.
La decisión de enviar a la Guardia Nacional para que trabaje junto al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas generó distintas polémicas, debido a que hay un nuevo choque de intereses republicanos y democráticos. Sin embargo, el presidente estadounidense ya dejó en claro su postura contraria al diálogo.
Los manifestantes provocaron incidentes en el lugar.
El antecedente de Estados Unidos enviando la Guardia Nacional a las calles
La última vez que un gobierno envió a la Guardia Nacional a las calles sin el aval del gobernador de turno fue en 1965, cuando Lyndon B. Johnson era presidente de Estados Unidos. En aquel momento, se desarrollaron marchas por los derechos civiles en Alabama que derivaron en graves incidentes.
El gobernador del estado era el demócrata George Wallace, quien se puso en contra de la decisión que había tomado el estado estadounidense.

















