El gobierno nacional cerró el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA) y quedaron sin terminar obras en distintos puntos del país, que ahora no tienen financiamiento nacional y que para las provincias tienen un costo muy alto para tomar en el marco del ajuste que lleva a cabo la administración estatal.
Es el caso del Plan Director de Agua Potable en Viedma con las obras de la planta potabilizadora ubicada en la costanera norte de la capital provincial, que quedó paralizada con aproximadamente un 11 por ciento de ejecución, a partir de la decisión del gobierno de Javier Milei, de parar la obra pública y que peligra en su continuidad por falta de financiamiento.
Precisamente el ministro de Obras Públicas de la provincia, Alejandro Echarren, está buscando información en Nación, incluso para saber si esta obra de la capital viedmense, está dentro del presupuesto nacional enviado al Congreso, una posibilidad remota.
Cabe recordar que el ENOHSA tenía obras financiadas, algunas junto con el BID, en Bariloche, que es la única con altó índice de ejecución, y que podría finalizarse, La planta de Catriel no tendría financiamiento nacional lo mismo que alrededor de siete obras municipales, la mayoría en General Roca, que quedarían paralizadas por el cierre del organismo nacional.
Además, también preocupa en el gobierno el destino de un conjunto de obras que estan incluídas en el acta acuerdo firmado por Nación, y que según las previsiones presupuestarias de Nación, no figurarían tampoco en el presupuesto 2025, que implicaría el desconocimiento del convenio suscripto por el gobernador Alberto Weretilneck, con el Jefe de Gabinete Guillermo Francos.
Esta obra de la ampliación de la planta potabilizadora de Viedma, tenía financiamiento total del programa PROFESA, con un presupuesto inicial de 1.300 millones de pesos, desde ya desactualizado luego del proceso inflacionario del país y comprende refuerzos de redes de distribución y una nueva planta potabilizadora diseñada con una proyección de 30 años, según se informó en su momento.
La empresa CODAM SA., paró los trabajos de la planta de la costanera norte, adonde estaban previsto trabajos de infraestructura con un sistema de coagulación, de floculación, de sedimentación, de filtración y cloración, mediante un sistema completamente automatizado con una capacidad de producción de 3045 m3/h, triplicando la capacidad actual.
El proyecto contemplaba que la obra civil sería complementada con una nueva cisterna de agua tratada de 2300 m3, una estación de bombeo con sistema de retrolavado de filtros, un nuevo acueducto y la alimentación a la red de distribución. Del mismo modo, se proyecta construir una sala química, oficinas para comandos del sistema y salas de tableros.
También se sumaba la instalación de refuerzos de las redes de distribución, con 13.600 metros de cañería de PVC K6 entre 110 mm y 500 mm, con la sectorización del servicio, por lo que si se producía un corte en un sitio puntual, estas mejoras permitirán que no se corte todo el suministro.
Todo esto quedó en la nada. Se levantará el Viedma, otro monumento en honor al plan anarcocapitalista del presidente Javier Milei, que nos recordará por años el retiro del Estado en la ejecución de la obra publica y a la vez una pesada herencia para el gobierno de Alberto Weretilneck, sobre la imposibilidad económica de financiar los trabajos.
Te puede interesar
Lo más visto
