Actualidad: Se activa el Congreso: el Gobierno manda la ley Bases y la oposición debate el DNU

Luego de semanas de impasse, el Congreso tomará protagonismo a partir de este martes con movidas del Gobierno y de la oposición. Luego de dos nuevas reuniones con los bloques de la oposición dialoguista, desde el Ejecutivo anunciaron que entre hoy y mañana mandarán el proyecto de ley Bases con el agregado de la reimplantación del impuesto a las Ganancias a partir de un piso de 1,8 millones de pesos para los trabajadores solteros y 2,2 millones para los casados con dos hijos. Con eso esperaban dar respuesta a los necesidades de los gobernadores, dado que se trata de un impuesto coparticipable. Por su lado, el bloque de Unión por la Patria junto al FIT y a otros diputados posicionados en la vereda de enfrente de la administración de Javier Milei llevarán adelante una jornada debate con abogados constitucionalistas como primer paso al rechazo definitivo al decreto 70/2023. Si lo consiguen, sería una estocada fuerte para el Gobierno.

El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro del Interior, Guillermo Francos, mantuvieron las últimas conversaciones para hacer los retoques finales al borrador de ley Bases que llegará a la Cámara de Diputados para su discusión en comisión. Recibieron a las dos bancadas dialoguistas a convencer: la de Hacemos Coalición Federal que encabeza Miguel Angel Pichetto y la de la UCR de Rodrigo de Loredo. El mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias -no ya su retorno, que parece fuera de toda discusión- fue uno de los temas de debate. Después de escuchar a gobernadores y bloques moderados, el Gobierno concluyó que el piso más conveniente sería de 1,8 millones. Para los gobernadores patagónicos seguirá siendo bajo. Se verá que suerte corre en el Congreso. 

Si bien tanto el bloque radical como el heterogéneo de Hacemos remarcaron de nuevo su disposición a darle al Gobierno las "herramientas" para gestionar, también detallaron sus diferencias respecto a varios puntos del proyecto, que si bien es la tercera parte de la ley ómnibus original no deja de ser una mega iniciativa que abarca múltiples aspectos. Las facultades delegadas, las desregulaciones, las empresas a privatizar y los alcances del blanqueo impositivo son algunos de esos ítems que se seguirán discutiendo en comisión y en el recinto. Es una incógnita si esta vez el Ejecutivo está dispuesto a negociar o mantiene la inflexibilidad que caracterizó el primer debate, que terminó en fracaso estrepitoso.

De esta forma, quedó definido que el capítulo fiscal acompañará la discusión de la ley Bases, como es lógico. Días atrás había surgido la versión de que Milei exigía primero la aprobación de la ley antes de asegurarle a los gobernadores los recursos para atender sus necesidades fiscales. Incluso, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, lo había dado a entender el domingo, luego de participar en el lanzamiento de la filial porteña de La Libertad Avanza. "El paquete fiscal no sé si se va a incorporar o no. Creo que Ganancias va a quedar para otra etapa, no dentro de la ley", había sostenido. No será así. Muchos gobernadores no aceptarían semejante condición para votar la ley, ahora todo se discutirá al mismo tiempo.

 Milei puso la aprobación de estas propuestas como paso previo indispensable para llegar al pacto de Mayo en la fecha patria, en poco más de un mes. “No me importa si se me cae el pacto de Mayo si no me aprueban la Ley Bases. Si quieren confrontar, va a haber confrontación. Se lo digo a todo el sistema político: son diez reglas para una economía sana", sostuvo en la entrevista con Alejandro Fantino. También se la agarró contra los que votaron la derogación del DNU en el Senado, a quienes de una manera enrevesada buscó emparentar con la dictadura militar. Es que el decreto 70/2023 parece estar ingresando en un tramo clave porque el bloque de Unión por la Patria buscará a partir de hoy iniciar la ofensiva para su rechazo en la Cámara de Diputados.

 A partir de las 14, en el anexo de la Cámara baja, organizaron una jornada debate a la que convocaron constitucionalistas, representantes de entidades de abogados y demás especialistas. “Es imprescindible rechazar el inconstitucional y nocivo DNU 70/2023", sostuvo el jefe del bloque de UP, Germán Martínez, con la consigna #NoAlDNU que buscarán convertir en tendencia. Si bien es la más numerosa, la bancada de Unión por la Patria cuenta con 99 diputados, a 30 del número necesario para el quórum y el rechazo a la norma. Para esta movida sumaron los cinco del FIT, los dos socialistas santafesinos y algunos radicales de la línea de Facundo Manes. Tienen que arrimar también legisladores de partidos provinciales para llegar al número necesario.

 Luego de la jornada de esta tarde, firmarán un pedido de sesión especial que enviarán a Martín Menem. Si lo firman al menos diez diputados, el presidente de la Cámara está obligado a convocar a sesión. A los convocantes le queda la responsabilidad de juntar el número necesario para el quórum, de lo contrario la sesión se caerá y el DNU seguirá vigente. Como saben que para muchos diputados provinciales y de la oposición dialoguista son como la mancha venenosa, en Unión por la Patria prefieren que el reclamo por la sesión especial lo motoricen los radicales, socialistas y algún otro integrante del bloque de Pichetto como Margarita Stolbizer o los lilitos de la Coalición Cívica.

De acuerdo a un integrante de la mesa chica de la CGT que en los útltimos días anduvo recorriendo despachos en busca de sumar voluntades, faltan unos siete votos para votar el rechazo. No parece inalcanzable. Sería la primera vez en la historia que ocurriría y representaría un duro golpe para los planes de Milei de gobernar en buena medida prescindiendo del Congreso y avanzando sobre derechos establecidos. A partir de estar tarde empezará a quedar más claro qué tan cerca está esa posibilidad.