


Rusia: cuáles son las condiciones que puso Vladimir Putin para terminar la guerra con Ucrania
Actualidad15/03/2025




A más de tres años del inicio de la invasión de Rusia a Ucrania, el escenario bélico sigue sin una solución clara. Mientras los combates continúan en el frente, el Kremlin mantiene condiciones rígidas para cualquier acuerdo de paz, lo que complica la posibilidad de poner fin a la guerra en el corto plazo.


Desde Moscú, el presidente Vladimir Putin aseguró que en principio respalda la propuesta de un alto el fuego de 30 días, una iniciativa impulsada por Estados Unidos y aceptada por Ucrania.
Sin embargo, el líder ruso planteó dudas sobre cómo se implementaría la medida en un frente de batalla tan extenso. Esta posición sugiere que Rusia podría alargar las negociaciones sin rechazar abiertamente la propuesta, al tiempo que evalúa sus propias exigencias para la tregua, como la suspensión del suministro de armas occidentales a Kiev.
Actualmente, Rusia controla cerca del 20 % del territorio ucraniano y no tiene intención de devolverlo. De hecho, el Kremlin ha reafirmado que regiones como Crimea, Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia son parte de su país y así están registradas en su Constitución.
En el pasado, Putin dejó en claro que solo aceptaría cesar las hostilidades si Ucrania renuncia a ingresar en la OTAN y entrega oficialmente cuatro regiones ocupadas. Kiev, por su parte, se mantiene firme en su postura de no ceder territorio, aunque su estrategia ha virado hacia la obtención de garantías de seguridad en lugar de la recuperación inmediata de las tierras ocupadas.
La posición de la OTAN es clave en este conflicto. Mientras Putin considera la expansión de la alianza como una amenaza existencial para Rusia, Ucrania ve en la membresía una garantía fundamental para su defensa. Sin embargo, desde Washington han señalado que, por el momento, la adhesión de Ucrania no es un escenario realista. En este contexto, la posibilidad de que fuerzas de paz extranjeras intervengan en territorio ucraniano ha sido descartada rotundamente por Moscú, que amenaza con represalias ante cualquier despliegue militar de Occidente en la zona.
El conflicto no solo se libra en el campo de batalla, sino también en el ámbito diplomático y económico. Recientemente, Rusia y Estados Unidos han retomado contactos en Estambul para discutir temas como el funcionamiento de sus embajadas y la posible flexibilización de sanciones.













