


La Corte Suprema de Brasil envió a juicio a Jair Bolsonaro por un intento de golpe de Estado
Actualidad27/03/2025




La Corte Suprema de Brasil decidió por unanimidad llevar a juicio a Jair Bolsonaro por su presunta participación en un intento de golpe de Estado para impedir la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva. En total serán siete acusados que enfrentarán cargos por “abolición violenta del Estado democrático de derecho, intento de golpe de Estado, organización criminal armada y deterioro del patrimonio público”.


Según la Fiscalía, el expresidente lideró un complot que incluía la elaboración de un decreto para instaurar un “estado de defensa” e incluso el asesinato de Lula da Silva y el juez Moraes. Además, la Justicia lo vincula directamente con el asalto a las sedes de los tres poderes en Brasilia durante el 8 de enero de 2023, cuando miles de seguidores de Jair Bolsonaro intentaron derrocar al Gobierno recién asumido.
Ahora, el antiguo jefe de Estado está inhabilitado políticamente hasta 2030 y podría recibir hasta 40 años de prisión, mientras él afirma que es víctima de una persecución. En una declaración pública, calificó el proceso como “la mayor persecución político-judicial de la historia de Brasil” y aseguró que buscan impedir su candidatura en las elecciones de 2026. Por otro lado, ante los rechazos a sus apelaciones, la votación fue brindada por los jueces Alexandre de Moraes, Flávio Dino, Luiz Fux, Carmen Lúcia y Cristiano Zanin.
De cualquier manera, esto no apagó el movimiento de personas que siguen sus políticas y, por el contrario, se han mostrado muy conformes con lo que ha hecho Jair Bolsonaro fuera de la política. Cabe señalar que desde mediados del año pasado es que recibió la noticia sobre su salida oficial de la política a partir de sanciones.
Los expresidentes brasileros que fueron acusados por corrupción
Lula da Silva, actual mandamás brasileño, estuvo detenido entre 2018 y 2019, sumando 19 meses en la cárcel. Sin embargo, hoy en día está libre y sigue trabajando asiduamente. Pero Lula y Bolsonaro no son los únicos complicados con la Justicia tras ser notificados.
Por ejemplo, Michel Temer fue detenido en 2016 y 2018 por irregularidades en contratos. Algo similar les ocurrió a otros exponentes como Fernando Collor, Dilma Rousseff y José Sarney. Todos ellos tuvieron problemas con las autoridades.













