


Tierra del Fuego: “No se puede defender al consumidor destruyendo al trabajador” destacó Abel Furlan
Tierra del Fuego17/05/2025




El secretario general de la UOM nacional, Abel Furlan, habló con Mañanas Diferentes, por FM Espectáculo 93.1, luego de llegar a Tierra del Fuego para acompañar el reclamo que llevan adelante las y los trabajadores, en rechazo a la decisión unilateral del Gobierno nacional de bajar los aranceles a la importación de celulares.


El referente de los metalúrgicos de la República Argentina advirtió que “sin empleo no hay consumo” y “sin industria no hay ningún tipo de futuro. Los países que definieron hacer crecer su industria, fueron los que le dieron a su sociedad la posibilidad de pensar un proyecto de vida. Claramente la industria es la posibilidad cierta de que los argentinos puedan pensar un proyecto de vida”.
Respecto al argumento oficialista sobre una presunta baja en los precios de los celulares, Furlan advirtió que es “claramente mentiroso. El Gobierno de Macri, con el ministro Cabrera, echó por tierra la producción de las notebooks. El argumento era que los argentinos no podíamos estar comprando las computadoras más caras del mundo. Pasaron años, y hoy se venden las más caras del mundo. Destruyeron más de 5 mil puestos de trabajo con ese argumento. Hoy llevan adelante los mismos”.
“Si van a achicar el Estado y a destruir la industria, ¿qué va a dignificar este pueblo?”
Y subrayó que “nos quieren hacer creer que es una medida que va a beneficiar al pueblo, pero lo va a perjudicar, como a todo el entramado productivo. Usan esto diciendo que el pueblo va a estar mejor”.
A modo de ejemplo, graficó: “Un IPhone en Argentina vale 2 millones y medio de pesos, mientras que en cualquier parte del mundo vale 900 dólares. No se fabrica en Tierra del Fuego. Eso deja en claro que lo que dicen es una mentira”.
Además, el secretario general de la UOM expuso que “cuando uno mira el mundo, que hoy está en crisis y con muchísimas tensiones, uno de los principales temas es quién se queda con el trabajo calificado. Las principales tensiones tienen que ver con el trabajo. Nos quieren hacer creer que el único beneficiario es el consumidor, pero si los trabajadores pierden su empleo, si las ciudades se vacían y cae el poder adquisitivo ¿quién va a poder consumir los productos más baratos?”.
El gremialista aseveró que esta medida “no es aislada”, sino “un paso más”: “Esto arrancó con la eliminación de aranceles que protegían sectores estratégicos importantes como las motos, las bicicletas y electrodomésticos; la desregulación del comercio interior; la eliminación de reglamentos técnicos que dificultan la solicitud de medidas antidumping; la derogación del compre argentino; la parálisis total de la obra pública; una fuerte caída del consumo interno; la eliminación del Certificado de Importaciones de Bienes de Uso”, detalló.
Por otro lado, puso en valor el rol geoestratégico de Tierra del Fuego: “Estamos a 700 kilómetros de las Malvinas. Hay una cuestión geopolítica que decidimos llevar adelante para proteger el territorio y la industria nacional. Dejar 7 mil familias sin posibilidad de trabajo, es una política artera que no tiene nada que ver con lo que los argentinos necesitamos. No nos dejan otra situación que no sea la lucha”.
“El mundo mira hacia adentro y protege su mercado interno, porque es el poder de cualquier nación. Argentina se abre de manera artera para destruir todo lo que disponemos”.
A esto se suma que “nuestro país dispone de 8 o 10 recursos naturales que serán demanda del mundo entero, ¿cómo vamos a destruirlo en vez de pensar en darle valor agregado para que genere mayor empleabilidad y mejores salarios? Para que los argentinos puedan pensar un proyecto de vida. Nos están quitando nuestros sueños. Por eso me enorgullece el pueblo de Tierra del Fuego, que quiere pelear porque sabe que su dignidad y su futuro están en juego”.
“No es solamente destruir la industria. Hay una cuestión geopolítica y estratégica. Nosotros tenemos que pensar que las decisiones que se tomaron tienen que ver con defender este territorio y tener una estrategia geopolítica que permita que Argentina defienda sus intereses ¿Cómo vamos a dejar el territorio a merced de los países que están deseosos de venir a quedarse con nuestras islas y nuestra Antártida?”, continuó.
Para cerrar, habló sobre la situación nacional, y comentó que desde la UOM son “parte de la Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina. Convivimos 33 organizaciones sindicales. Representamos a 1 millón 200 mil trabajadores. Esto atraviesa por igual a todas las organizaciones sindicales”.
“Le está yendo mal a todos los gremios que representan la industria. Hay un modelo de país que tiene que ver con la desindustrialización; que apunta a que Argentina sea un país extractivista para que los poderosos del mundo vengan y se lleven los recursos naturales sin que nadie les diga nada”, culminó.















