Neuquén: La Comisión Nacional de Energía Atómica avanza en la reactivación de la PIAP

El presidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), Germán Guido Lavalle afirmó que existen avances significativos en las negociaciones para la reactivación de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP), ubicada en la provincia de Neuquén. A fines de mayo, se puso en marcha este objetivo cuando Lavalle se reunió con el ministro de Infraestructura, Rubén Etcheverry. 

"Estamos de acuerdo, las autoridades provinciales y la Comisión Nacional de Energía Atómica, que queremos que la planta de agua pesada se reactive y produzca", sostuvo el titular de la CNEA en declaraciones a Radio Nacional Neuquén. De esta manera, destacó el compromiso de ambas partes para encontrar los acuerdos necesarios con la finalidad de que la PIAP de Arroyito comience a producir. 

Uno de los puntos centrales de las negociaciones es la definición del manejo de la planta. Lavalle explicó que "hay un propietario de la planta, que es la Comisión Nacional de Energía Atómica, y un operador, que es la empresa neuquina ENSI". En ese sentido, llevó tranquilidad y aseguró: "No queremos desvincular a la provincia de la operación de la planta industrial". 

El primer paso para la reactivación, según Lavalle, es la comercialización de los productos, como el agua pesada. "Estamos conversando con empresas extranjeras, lo que implica que, detrás de esto, venga el alistamiento de la planta, la recontratación de personal, entrenamiento y puesta a punto de la planta", comentó. Además, agregó: "Hay avances, hay interesados. Estamos llevando ese interés a un acuerdo primario concreto de compra-venta, de precio, cantidad, etcétera".

La PIAP, que lleva siete años sin actividad, actualmente se encuentra bajo un programa de mantenimiento para conservar sus activos. Lavalle explicó que existen dos planes posibles: uno de mantenimiento y otro de alistamiento y puesta en marcha. "Estamos en mantenimiento, en conservación de los activos", concluyó el presidente de la CNEA. 

En mayo, cuando Lavalle se reunió con Etcheverry, el ministro de Infraestructura anunció: “Los plazos acordados son seis meses para ver, por un lado, el mercado mundial y, por otro lado, para ver otras opciones de inversión que queremos evaluar a través de distintos focos y distintos inversores que hoy ven la posibilidad de este activo tan importante que pueda ser utilizado también para otros usos petroquímicos”.