Tierra del Fuego: Es dramática la situación de la industria textil fueguina

Rodrigo Cárcamo, secretario general de SETIA (Sindicato de Empleados Textiles de la Industria y Afines), expresó que existe un “colapso de la industria nacional en la República Argentina” y remarcó que “el panorama es casi similar en todos los sectores”. Consideró que esta situación “se agudiza cada vez más porque el consumo no levanta” ya que “no hay manera de poder vender algo porque la gente no está comprando”.

“Yo creo que hasta diciembre podemos decir que vamos a estar sosteniendo la industria. Lo que pase después de este año es incierto”, expuso en cuanto a la situación puntual de los textiles. “Uno tiene las mejores expectativas pero las medidas a nivel nacional no están ayudando para nada. Es dramático lo que se está viviendo no solamente en nuestra provincia”, añadió.

“Todos los días tenemos contacto con la central nuestra y la situación es aún peor de cierre de empresas mucho más grandes y no hay ningún tipo de respuesta ni de solución. Cierran y queda la gente a la deriva”, comentó.

Consultado sobre las fuentes laborales, indicó que alrededor de 700 familias dependen del sector textil en Tierra del Fuego. “Hoy estamos en una especie de meseta respecto de los puestos de trabajo. No sabemos si en algún momento la tendencia va a mejorar o puede también empeorar. La realidad de las empresas es que están produciendo en alrededor de un 25 o un 30 por ciento de su capacidad total. Eso es estar al borde, si no produzco más que esto es difícil sostener el negocio”, evaluó.

Recordó que a fines de 2023 el sector textil provincial contemplaba más de mil puestos de trabajo y que “ha habido una baja bastante pronunciada de principio de año a la fecha”.

“Estamos completamente en alerta, tratando de ver de qué manera se pueden llegar a sostener la mayoría de los puestos de trabajo. Hablamos con el Gobierno Provincial para ver qué otras alternativas”, dijo el referente de SETIA.

Cárcamo resaltó que “la industria textil como la industria del calzado son las industrias más sensibles al consumo”. Opinó que si el consumo aumentara, las empresas podrían llegar a sostenerse pero advirtió que “acá hay una cuestión esencial que es que los salarios están pisados” y que “un montón de circunstancias que están diciendo que la economía no va a repuntar”.

“Si no hay industria, más que nada en nuestra provincia, los primeros afectados son los comercios y así el círculo virtuoso que teníamos lo están destruyendo”, cerró.