La tormenta generó voladuras de techos y caída de árboles. Las ráfagas de viento alcanzaron los 80 km/h y llovieron más de 30 milímetros en poco tiempo.
El alerta amarilla anunciado por el Servicio Meteorológico Nacional para este viernes se cumplió en la localidad de Realicó, donde la tormenta y los fuertes vientos provocaron serios inconvenientes.
La intensidad de la lluvia provocó anegamientos en el centro de la localidad y en algunos barros. También hubo voladuras de techos, caída de árboles y palmeras de telefonía con el temporal ocurrido por la noche, pasadas las 21 horas.
El temporal tuvo vientos que alcanzaron los 80 km/h. y la precipitación sumó 31 mm en pocos minutos. A pesar de todos los inconvenientes provocados por la tormenta, no se registraron personas heridas.
Según detalló el portal Infotec, que recorrió los lugares más afectados, el viento llegó en "seco" y voló al menos tres techos en el sector norte de la ciudad, entre calles Paraguay y Gobernador González, al norte del bulevar Belgrano.
Gregorio Luna, uno de los vecinos afectados, contó que afortunadamente "no había nadie dentro de la habitación cuando se le voló el techo completo". Dicha cobertura voló completa, cruzó por sobre el terreno de su vecino lindero y fue a impactar de lleno contra una segunda casa situada sobre bulevar Belgrano, donde produjo daños en una pared y destrozó el tanque del agua para luego caer en ese patio.
Del otro lado de la cuadra, sobre pasaje Mercedes de San Martín, ocurrió otro evento casi "calcado": a un vecino se le voló completo el techo de un pequeño taller de bicicletas, y el mismo impulsado por el viento dio de lleno en el tanque de agua de la vivienda lindera, perforándolo y rompiendo parte de la estructura de material que lo sostenía.
En otros sectores de la ciudad más céntricos se informó la quebradura de diversas columnas del tendido de telefonía fija, las cuales evidencian una falta de recambio, y al pudrirse su base con el viento se cortan a ras del piso.
En Calle Constitución, entre España y Francia, una palmera quedó sostenida por los cables, a punto de caerse sobre los pilares de la luz de dos viviendas. Ante tal situación personal de la Cooperativa Eléctrica llegó al lugar y si bien no le compete, de manera solidaria colocaron puntales para mitigar la situación hasta tanto la empresa telefónica se haga presente y de una solución.
En otros puntos vecinos informaron la caída de ramas de considerable tamaño provenientes de ejemplares del arbolado urbano.
Luego del viento, llegó la lluvia que en un breve lapso de tiempo descargó 31 mm. y generó una importante acumulación de agua, principalmente en el centro de la localidad.
El sector comprendido por la plaza Hipólito Yrigoyen, el edificio municipal y los clubes Ferro y Sportivo, tenían las calles cubiertas de agua de un cordón al otro.
Algunos vecinos manifestaron su preocupación por el fenómeno al preguntarse qué pasaría si caen 80 o 100 mm en poco tiempo. "Si con 30 estamos así, imaginate si caen 100, nos tapa el agua", indicaban los mensajes al portal realiquense.
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