







“Si lo logramos, seremos Gardel”. Con ese espíritu, el gobierno de Javier Milei se lanzará en los próximos días a una aventura sin precedentes para intentar convencer a millones de argentinos de que pueden utilizar sin preocupaciones los dólares que, en muchos casos, llevan décadas ahorrando.


El Gobierno avanza con la «batalla cultural», ahora para tratar de demostrar que quienes mantienen sus dólares fuera del alcance del Fisco no son evasores, sino «héroes». Y lo hará por decreto, para evitar que la oposición busque trabarlo en el Congreso. La «amnistía total» saldría en no más de dos semanas, publicó NA.
De esta manera espera recaudar al menos US$ 2.000 millones de impuestos este año por la medida, es decir que apunta a que se blanqueen unos US$ 10.000 millones de acá a diciembre. El presidente Javier Milei, quien, junto al ministro de Economía, Luis Caputo, busca las herramientas para garantizarle a millones de argentinos que si usan su «canuto» de divisas, no serán perseguidos y el Gobierno analiza la letra chica para dar garantías a esos ahorristas que podría jugar un rol clave para monetizar la economía y apuntalar el crecimiento.
Se trata de unos US$ 200.000 millones de piso que están guardados, que representan un tercio del Producto Bruto del año. Si parte de esos fondos se volcarán al sistema financiero, habría un shock de crédito. Entre las opciones que se barajan, está habilitar a productores del agro a pagar insumos directamente en moneda extranjera.
Como incentivo, se podría exceptuar a esas transacciones del pago del impuesto al cheque, que es de 1,2% del valor de la operación.
«Es una medida para los productores porque buscan los dólares que tienen atesorados», especulan en el mercado.
El ministro de Economía explicó que el objetivo de fondo es habilitar el uso de dólares no declarados para hacer algún consumo puntual: «Que se usen sin dar explicaciones».
«En los colchones, los argentinos debemos tener 200.000 millones de dólares, o 300 mil millones, o 400 mil millones, según a quién le pregunten que hace la estimación», asegura Milei y sostiene que para que la Argentina consolide el crecimiento, su administración está motivando la dolarización endógena. «Queremos evitar que ese proceso no se vea empastado o retrasado», explicó.
«Los que tienen los dólares en el colchón tienen miedo de dejar los dedos marcados y los vayan a buscar, esa es la realidad», señaló el jefe de Estado.
Con ese fin, entre ARCA, el Ministerio de Economía y el Banco Central se busca crear un mecanismo para que la gente pueda ingresar los dólares en el sistema, comprar lo que quieran y tenga garantizado que nadie los vaya a perseguir.
Pero hay un problema: el decreto podría chocar contra las leyes internacionales anti lavado. Por eso, trascendió que el Gobierno estaría en conversaciones con el organismo que combate el lavado de dinero (GAFI) y una de las posibilidades sería limitar la medida solo a los residentes, dejando afuera a capitales del exterior.
Para reforzar su idea, Milei volvió a calificar de «héroes» a quienes lograron evitar que el Estado les quite las divisas. «Los que tienen dólares en el colchón son los héroes que van a sacar adelante a este país. Ustedes no metieron dólares abajo del colchón porque odian al país; lo hicieron porque del otro lado había un conjunto de hijos de puta, delincuentes, que les afanaron con el impuesto inflacionario», enfatizó Milei, y dijo que quienes «llevaron los dólares al colchón no son delincuentes, son personas que se escaparon de los delincuentes legales, que son los políticos, y ladrón que roba a otro ladrón tiene mil años de perdón».













