







Javier Milei encabezó ayer el acto de lanzamiento de la campaña bonaerense, en La Plata, donde presentó a sus candidatos para las distintas secciones electorales. El mandatario optó por polarizar con el gobernador Axel Kicillof, a quien le dedicó una serie de insultos y lo acusó de “psicopatear a la población”.


Así, destinó duras críticas contra la gestión bonaerense y reforzó la controvertida consigna de “Kirchnerismo Nunca Más”.
“Pocos recuerdan un momento en que la Provincia haya estado peor que ahora”, sentenció Milei. “Tenemos el agregado de la negación constante e indiferencia de un gobierno provincial que parece creer lo que repiten como loros sus periodistas ensobrados. Tan acostumbrados están los bonaerenses que muchos se resignaron y dejaron de creer en un futuro mejor”, apuntó.
En su discurso indicó que “Kicillof y sus secuaces psicopatean a toda la población para que estén agradecidos con ellos. Dicen que si no fuera por ellos, no tendrían nada. Un delirio propio del tirano de aldea, el comunista enano de Kicillof”.
“El Estado es para sus amigos. Emprender en la Provincia es una odisea griega. O una maraña administrativa que, regulación tras regulación, entorpece la regulación de riqueza y exigen coimas para destrabar problemas que ellos mismos imponen. Ya empezamos con la jefa de la banda”, ironizó Milei en alusión a la expresidenta Cristina Kirchner, a quien suele calificar de esta forma.
En esa misma línea, el Presidente aseguró que el gobernador de la Provincia “no hace otra cosa que darle la espalda a la gente” y lo acusó de endeudar a los bonaerenses. “Gasta mal y el orden de prioridades está roto. La Provincia es un baño de sangre”, denunció.
“El gobernador prefiere financiar su campaña eterna y llenar la Provincia de ñoquis. Además, decidió gastar billones en políticas de genero que no resuelven nada más que el pasar económico de sus amigos. No solo gasta el gobernador, también muchos intendentes. Pero el problema es mucho más profundo y antiguo que Kicillof. Se trata de un Estado enorme con capa tras capas de burócratas inservibles y militantes se convirtió en una torta rogel putrefacta. Es un nido de parásitos”, expresó Milei.

















