La fiscalía de Delitos Económicos allanó este jueves por la tarde la casa particular de la destituida vicegobernadora Gloria Ruiz, con el propósito de secuestrar la camioneta Toyota 4x4 adquirida con fondos de oscura procedencia, durante el período en el que se la investiga por presunto enriquecimiento ilícito.
Gloria Ruiz fue destituida el pasado 20 de diciembre por “inhabilidad moral”, luego de descubrirse, entre otras tantas y burdas irregularidades, un millonario desvío de fondos de la Legislatura hacia la Casa de Las Leyes, en la que había nombrado coordinador a su hermano Pablo, quien resultó ser titular de dos plazos fijos en el BPN a su nombre, por unos 50 millones de pesos.
La fiscalía de Delitos Económicos la investiga por peculado, fraude al estado y presunto enriquecimiento ilícito. En el contexto de esas causas —que se tramitan por separado—, el fiscal jefe Pablo Vignaroli ordenó allanar la casa de Ruiz en la localidad de Plottier.
Un camión camilla se llevó una camioneta Toyota SW4 todo terreno 4x4 color gris oscura que Gloria Ruiz pagó poco más de 76 millones de pesos en el concesionario Nipon Car en agosto de este año, período que está bajo investigación.
La semana pasada, Vignaroli explicó sus dudas en cuanto al origen de los fondos para comprar esa camioneta. A grandes rasgos, dijo que la vicegobernadora justificó esa adquisición con dinero de “ahorros” provenientes de otra camioneta Toyota Hilux y el uso de su tarjeta de crédito. Pero la fiscalía descubrió que, en realidad, la Hilux estaba a nombre de su suegra, Norma Painevil, quien se la vendió en 53 millones de pesos a un tal Alejandro Costa, que resultó ser tío del marido de la destituida vicegobernadora, un jubilado que dijo haberla pagado de contado. Nada claro, por cierto.
Norma Painevil y Alberto Costa están imputados en la investigación que lleva adelante Vignaroli.