El ramal de trenes de pasajeros entre Once y Pehuajó dejará de funcionar a partir del primer día de noviembre, según se desprende de la nueva programación en la venta de pasajes de Trenes Argentinos. La empresa estatal actualizó días atrás su boletería virtual para la venta de pasajes de trenes de Larga Distancia y allí se confirma que el servicio de trenes de pasajeros que conecta hoy Pehuajó con Buenos Aires (Once), ya no llegará hasta Pehuajó y solamente lo hará hasta Bragado.
La medida, que entrará en vigencia el 1º de noviembre, y se pone fin así a la conexión ferroviaria con Pehuajó, dejando sin el tren de pasajeros que la une con la capital del país y localidades intermedias a parte de la región, ya que la decisión afecta también a las localidades de 9 de Julio y Carlos Casares. Pero además deja cada vez más lejos el sueño de contar con tren de pasajeros entre nuestra provincia y la Capital Federal.
“Según la nueva programación, el tren finalizará su recorrido en Bragado, como ocurría hasta hace dos años. El servicio de trenes ha sido una herramienta clave para la conexión de Pehuajó y la zona con otras localidades de la provincia y el país, y la eliminación de esta ruta ha generado una gran preocupación en la comunidad”, informó ayer la agencia de noticias NA.
“El tren no solo representaba una opción de movilidad económica, sino que también contribuía al desarrollo del comercio y las actividades culturales en la región, destacan las noticias publicadas en diferentes medios periodísticos de la región, que manifestaron su rechazo a la decisión gubernamental”, sostiene el cable.
El texto revela que la noticia fue recibida con “sorpresa y descontento” por parte de muchos vecinos de Pehuajó y localidades cercanas, ya que la pérdida de este servicio podría obligar a muchos a buscar alternativas más costosas o menos convenientes.
El tramo había sido reinaugurado en 2022 y tenía una buena ocupación hasta principios de este año, cuando se vio afectado por el incremento en los tiempos de viaje, el aumento de las tarifas y el deterioro que afecta a todo el ferrocarril.
“La oferta de larga distancia de la línea ya había sido reducida a principios de octubre, cuando se eliminó una de las tres frecuencias semanales a Bragado, quedando como reemplazo el servicio a Pehuajó. Ahora, ese tren que llegaba los viernes a Pehuajó y regresaba a Once los lunes circulará sólo hasta Bragado”, explicaron.
Según el cable, el servicio Once – Pehuajó era uno de los pocos que no se habían perdido ni siquiera con el desguace de Ferrocarriles Argentinos en la década de 1990, porque fueron sostenidos por Ferrobaires, empresa creada por el entonces gobernador Eduardo Duhalde que permitió salvar los trenes de pasajeros en territorio bonaerense.
Ferrobaires fue cerrada durante la gobernación de María Eugenia Vidal: si bien todos los servicios que prestaba la Provincia debían en teoría pasar a SOFSE, varios –como el de Pehuajó– quedaron sin reemplazo. El tren a Pehuajó recién fue repuesto en 2022, tras siete años de interrupción. La rehabilitación del tramo por parte de Trenes Argentinos implicó además la vuelta del ferrocarril a las estaciones intermedias de 9 de Julio y Carlos Casares. Además, fue considerado como el puntapié inicial para el retorno del servicio a La Pampa –proyecto finalmente no concretado–, que perdió todos sus trenes de pasajeros en 2016.
Además del tren a Pehuajó, el Gobierno dio de baja, en lo que va del año, los trenes a Palmira (Mendoza), Justo Daract (San Luis) y el expreso a Rosario, lo que se suma al recorte de frecuencias en otros corredores que continúan circulando, como el caso de Pinamar.
Hasta el año pasado era muy difícil conseguir asientos en la mayoría de los corredores de trenes de larga distancia, aun cuando los tiempos de viaje resultaban excesivos, pero el bajo precio, confort y la relativa confiabilidad de los trenes habían llevado a un crecimiento sostenido de la demanda.
Sin embargo, el deterioro general del sistema ferroviario generó que los trenes pierdan casi todos sus atractivos, empujando a las personas a optar por otros medios de transporte, lo que derivó en una justificación para el cierre de los ramales.