Las alianzas que Rolando Figueroa conformó con el objetivo de llegar a la gobernación y las que fue construyendo desde que asumió dejaron un escenario casi sin oposición en la provincia de Neuquén.
Y esto cabe tanto para lo que será la primera prueba electoral del año que viene, donde se elegirán diputados y senadores nacionales, como también si se hace una proyección respecto a la pelea que se dará en el 2027.
Como se sabe, dentro del Frente Neuquinizate convergen, entre otras fuerzas políticas, el partido que creó el gobernador (Comunidad), sectores del peronismo, el PRO y libertarios.
A ellos se agregaron, fruto de dos acuerdos, un sector importante del MPN, a partir del “operativo retorno” impulsado por actuales y ex intendentes emepenistas que se sumaron en apoyo a Figueroa en la cumbre de Chos Malal, y el sellado con el intendente capitalino Mariano Gaido. Ambos se hicieron pensando en las elecciones nacionales 2025.
Para esa instancia, el sector del PJ figueroista donde están, entre otros, Tanya Bertoldi, Marcelo Zúñiga y Ana Servidio, es de la idea de fortalecer la gestión de gobierno del que forman parte, con lo cual apoyan la movida de ampliar aún más este frente de partidos que lidera el gobernador, participando del armado electoral e, incluso, aceptando que se sume un sector del MPN.
A su vez, en el PRO hay visiones distintas dentro del propio espacio que forma parte del frente “Neuquinizate”. Por un lado, algunos plantean que es muy prematuro hablar del tema, pero advierten que lo nacional es independiente del armado provincial, en el sentido de que en los comicios del año que viene el proyecto político de la provincia no está en juego, sino la representación de los partidos en el Congreso donde, en este caso el PRO, debería llevar sus propios candidatos.
Pero hay otra postura dentro de este partido nacional de que la construcción debe ser hacia adentro del actual frente político, fortaleciendo al gobierno provincial y que para las elecciones que se vienen, aunque sean nacionales, la posición debe ser la misma.
A su vez, Figueroa deslizó que podría ampliar aún más los acuerdos que fue tejiendo, a partir del guiño que le hizo en la semana al intendente de Cutral Co, Ramón Rioseco, luego de que ambos participaran de la inauguración de las obras de ampliación del hospital de Cutral Co-Plaza Huincul.
A partir de este escenario planteado hay una pregunta que se impone: ¿dónde está la oposición en la provincia? Si la mira se pone en el 2025, los libertarios dentro del frente “Neuquinizate” aseguran que van a ir con candidatos propios a los comicios nacionales. Allí no importan tanto los nombres como sí el peso que puede otorgar el acompañar con un sello libertario al gobierno nacional del presidente Javier Milei.
Y ahí se explica la estrategia de Figueroa de sumar, por ejemplo, al MPN, con el propósito de que esos potenciales votos emepenistas vayan por dentro y no por fuera de su frente de partidos.
Lo que se analiza desde el oficialismo provincial es que la Libertad Avanza será uno de los principales contrincantes a la hora de disputar las bancas que estarán en juego en el Congreso Nacional.
¿Y el resto? Da la sensación que el sector del PRO que impulsa la idea de llevar candidatos propios es minoría en Neuquén y que el peronismo, al haberse fragmentado, perdió fuerza.
Los principales referentes de este PJ que busca conservar una identidad propia alejada de los “figueroistas” están, por un lado, en la Legislatura, representados por Darío Martínez y Lorena Parrilli; mientras que a nivel nacional en esa línea se ubican también el actual diputado nacional Pablo Todero y los senadores Oscar Parrilli y Silvia Sapag.
Por el lado del MPN, sólo algunas voces aisladas, como la del diputado provincial Gerardo Gutiérrez, no comulgan con el desembarco del histórico partido provincial en el espacio de Figueroa.
En definitiva, el gobernador parece tener un camino bastante allanado, al menos desde los acuerdos políticos. La otra cuestión a observar es si eso después, llegada las elecciones, se traducirá en las urnas, teniendo en cuenta, como ya se dijo en más de una oportunidad, que el apoyo a Figueroa que lo consagró gobernador fue, en gran parte, a través de un voto anti MPN.
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